Con profundo gozo nuestra Hermandad eleva su voz para dar la más solemne bienvenida a Su Santidad, el Papa León XIV, elegido para guiar a la Santa Iglesia en estos tiempos de esperanza y desafío.
Nos unimos en oración con toda la cristiandad, agradecidos al Espíritu Santo por haber suscitado en el corazón del Colegio Cardenalicio la sabiduría de elegir a un pastor según el Corazón de Cristo. Reconocemos en Vuestra Santidad la continuidad del Magisterio apostólico y la renovada fuerza del Evangelio que vivifica a la Iglesia en todo el mundo.
Como Hermandad Pontificia y fieles servidores de la tradición, la caridad y la unidad, nos comprometemos a orar por Su Santidad y a colaborar, con obediencia y entrega, en la misión que le ha sido encomendada: confirmar a los hermanos en la fe, promover la justicia y la paz, y ser luz para las naciones.
¡Ad multos annos, León XIV!
Que la Santísima Virgen María, Madre de la Iglesia, lo acompañe y proteja en su pontificado.